4 de mayo de 2011. *Trenca Dish* c/ Padre Tosca nº3 963911861

Especialidad del local: Tapas
Ambiente: Relajado
Plato que no te puedes perder:  Patatas bravas
Url: http://elmiercolestoca.blogspot.com/2011/05/4-de-mayo-de-2011-trenca-dish-c-padre.html
Nos sirvieron todo lo que pedimos de la carta: Si,  dejamos que nos eligieran los platos


Puntuación EMT: 67 sobre 80

1. Ingredientes reconocibles: 8

2. Saludable: 8

3. Emplatado y decoración: 8

4. Raciones generosas: 8

5. Cocina regional: no

6. Tecnología punta: si

7. Sabroso: 10

8. Equilibrio: 8

9. Vajilla y cristalería: 8

10. Relación calidad-precio: 9

  
La Cena: Esta excelente noche primaveral nos vamos al distrito de Ciutat Vella, al barrio del Carmen, a encontrar este local, bistro de Raul Aleixandre. Después de darnos unas cuantas vueltas por las callejuelas del barrio, encontramos el local.

Se trata de un espacio bello, bien decorado y con pequeños comedores que crean una grata sensación de intimidad.  Tambien nos cautiva su historia, la más reciente por ser el relevo del Restaurante Arbequino, relevo vigoroso llevado a cabo por Raul Aleixandre (Ca Sento) en la línea de crear nuevas versiones y marcas apoyadas por el buen hacer de los locales más estrellados y que han llevado a cabo ya en Valencia tanto Ricard Camarena (Arrop) como Quique Dacosta (Mercatbar y Vuelve Carolina) y la historia más antigüa que se corresponde con la época en que las Torres de Serranos, en los tiempos en que fueron prisión de Plebeyos y Nobles, eran frecuentadas, para atender a los reclusos, por las bellas señoritas que se recogian en este local, objeto de nuestra cena, desde entonces ha tenido varios destinos, incluso el de ser utilizado como refugio durante la Guerra Civil Española. Pero dicho esto, toca leer las cartas que nos han dejado en la mesa y hacer la comanda. A la pregunta de si vamos a tomar algún aperitivo, respondemos que vamos a pedir directamente un vino, momento en el que nos recomiendan el que estan promocionando a traves de una pizarra, ae trata de Mo del 2008, Tinto D. O. Alicante, elaborado esencialmente por monastrel con algo de garnacha y cabernet para amansarlo. Vino aromático, bien integrado, elegante y sin pretensiones. Nos gusta el vino y el que se publicite con un precio muy atractivo (9 euros).

Para cenar vemos que hay muchos (y deliciosos) entrantes y pocos segundos. No tienen ningún menú de degustación pero nos proponen elegirnos algunos entrantes y terminar con un segundo para compartir. Aceptamos y dejamos que nos elijan aquellos entrantes más sugerentes.

Y comienza el espectáculo. Anchoas sobre cebolleta asada: el dulce de la cebolleta contrasta con el salado de la anchoa (sabrosa, esponjosa. ¡Impresionante!). Descansaban sobre un tremendo aceite de oliva que sucamos con deleite, de casta le viene al galgo y desde luego hace mucho tiempo que no encontrabamos un sabor tan autentico.

Buñuelos de bacalao: hetéreos buñuelos con un suave sabor a bacalao. Bocado delicioso con clara inspiración de la cocina de Ca Sento, aunque no podemos confundir ambas, ni en factura ni en precio (para ver la diferencia se puede ver nuestra critica de Ca Sento Abraza Enopata). Seguimos con una entrada sugerida por quien nos atiende, se trata de la brocheta de alcachofas, para nosotros el más flojo de los entrantes, aunque nos ha encantado la

salsa romesco, las alcachofas tenían un intenso sabor a citricos como si fueran de conserva; sin embargo la tempura estaba perfecta.

El premio a la diversión sin duda se lo merecen las Patatas bravas. Pese a la normalidad de la tapa, nos encontramos un desfile de soldaditos comestibles, en fila de a dos, de impecable ejecución, y que nos produce en cada bocado, una intensa experienca de sabor,  con tomate picante inyectado en el interior de cada cilindro, con el contraste del ajoaceite que viene medido y situado en todos los soldaditos a modo de boina. Nos encantan.
Seguimos con el plato más delicado de sabor de la noche, Canelones de carne y voletus. Sin dudarlo, el entrante estrella. Tremendo sabor a voletus, con una suave salsa semidulzona. Nos dejan con ganas de más.

Navajas con aire de limón. Impresionantes navajas en su punto de plancha y con una espuma de limón (que no sabemos concretar su sabor y nos hace sorber toda la espuma por todo el plato buscando su sabor). Ricas y sin un ápice de arena. Gracias por hacernos disfrutar de las navajas.
 

Como plato fuerte nos emplatan dos medias raciones de carrillera de buey sobre un puré de patata bien cremoso y con una salsa reducción que nos hace suspirar pese a que la carrillera en algunos estremos acusa el calentamiento.

Como postre y dado que no tienen calvados (en cuyo caso hubieramos pedido tarta tatin), nos pedimos uno de chocolate: ganache de chocolate con helado de leche y frutos rojos ligeramente escarchados, buen chocolate (aunque nos hubiera gustado, sobre todo a Karoleta, que fuera más intenso en cacao, más negro) con un suave helado.

Quesoy remata la cena con su consabido ristreto y Karoleta le acompaña con un chupito de Jack Daniels que viene en vaso helado (buen detalle que hace que el licor, no pierda su sabor).

Buena cena, buenos entrantes y estupendo y bello local.