20 de noviembre de 2013. El Rodamón de Russafa C/ Sueca, 47 Tf 963218014

Especialidad del local: gastrobar
Ambiente: informa, espacioso
Plato que no te puedes perder: rollitos de pato con salsa de chile dulce

Nos sirvieron todo lo que pedimos de la carta: 

1. Ingredientes reconocibles: 8
2. Saludable: 9
3. Emplatado y decoración: 8
4. Raciones generosas: 8
5. Cocina regional: no
6. Tecnología punta: no
7. Sabroso: 8
8. Equilibrio: 8
9. Vajilla y cristalería: 8
10. Relación calidad-precio: 8
Puntuación EMT 65 sobre 80
Puntuación del grupo PIG: 3

Una noche más, estamos en el barrio de Russafa buscando un local. Tiene nuevos dueños (antes era la LLuerna) y han cambiado la filosofía del local. 
Nos invitan a sentarnos en cualquier mesa (tienen ocupado el salón privado con una cena de grupo y hay unas cinco mesas ocupadas. Buena cantidad de comensales para ser un miércoles noche y teniendo en cuenta que todo el barrio, especialmente la calle Sueca, está en obras y, por lo tanto, de difícil acceso). Elegimos una buena mesa, bien iluminada. Nos dejan leyendo las cartas.
  
Observamos que los vinos son de un precio "asumible" y además permiten tomarlo por copas (buena idea). Nos inclinamos por un ribera, Convento Oreja roble del 2012. Un vino con buen toque de madera, sabroso pese a su juventud. Una delicia.
También vemos que la carta está dividida en tipos de cocina. Por ejemplo 'Allez enfants de la patrie' son platos, cómo no, franceses 'Tigre y Dragón' ¿adivinas? pues si, cocina oriental y así por varias cocinas.
Nos decidimos por muchos platos franceses: steak tartar Julio Verne (ciertamente una delicia de tartar. Personalmente lo hubiera puesto más aliñado y más picante pero a Quesoy le entusiasmó), micuit foie (micuit algo soso, le faltaba aromatizarlo con armagnac y algo más de sal y pimienta. Correcto) y unos deliciosos rollitos de pato con salsa de chiles (crujientes, bien rellenos de un pato tierno y sabroso y con la salsa agriculce de chiles...¡perfectos!).

Como plato fuerte pedimos un parmentier con carrillera: la carrillera muy tierna y sabrosa, con buena salsa, aunque la textura puede mejorar. Buen plato.
Como postre una tarta de manzana: más bien una tarta pudding de manzana con helado.
Quesoy remata la cena con su consabido ristreto. Nos ofrecen un digestivo y al final nos decidimos por un par de chupitos de bourbon Jack Daniels para entrar en calor. La noche lo requiere.

30 de octubre de 2013. La Cantina de Appetite c/ Pintor Salvador Abril, 7 Tf 961105660 - 607765256

Especialidad del local: gastrobar
Ambiente: informal, acogedor
Plato que no te puedes perder: alitas de pollo con citronela
http://elmiercolestoca.blogspot.com.es/2013/11/30-de-octubre-de-2013-la-cantina-de.html
Nos sirvieron todo lo que pedimos de la carta: si

1. Ingredientes reconocibles: 8
2. Saludable: 9
3. Emplatado y decoración: 7
4. Raciones generosas: 8
5. Cocina regional: no
6. Tecnología punta: no
7. Sabroso: 8
8. Equilibrio: 8
9. Vajilla y cristalería: 8
10. Relación calidad-precio: 8
Puntuación EMT 64 sobre 80
Puntuación del grupo PIG: 3

Esta noche vamos al gastrobar que han abierto las dueñas de Appetite. Es un sitio con menús algo más informales. Arantxa y Bonnie me comentaron que habían cogido la comida que se puede tomar por las calles de Thailandia, la han redondeado, mejorado y puesta en platos para compartir. Nos parece una idea muy interesante.
Tienen dos formatos: cinco tapas a compartir al centro de la mesa o tres tapas al centro y dos platos principales. Los platos nos recuerdan, como no, a Appetite: orientales, con toques mediterráneos acordes al paladar de esta zona (pero si lo pedís, os ponen todo el picante que os guste). 
Nos ubican en una mesa amplia y nos dejan eligiendo los platos. Mientras nos decidimos, nos pedimos dos cervezas porque hace una noche algo calurosa. Nos decidimos por la opción de tres tapas y dos platos fuertes.
Para acompañar nuestra cena pedimos un vino tinto, Juan Gil, 100& monastrell. Como está algo menos frío de lo que nos gustaría, le pedimos que nos lo refresquen.
Y comencemos: wanton de cerdo y gambas. Delicadas empanadillas rellenas con salsa para acompañar. Rollitos vietnamitas de cangrejo: crujientes, deliciosos. Y alitas de pollo crujientes con citronela. Crujientes y tiernos por dentro, con una salsa agridulce con chile...¡de lo mejor!. Con un delicioso toque de citronela. Ciertamente, muy ricos.
Como platos fuertes nos decidimos por dos picantes. Curry thai rojo de ternera: tremendo curry bien de picante acompañado de arroz con verduras. Para los amantes del curry, una delicia.
Chili con pollo, albahaca y arroz. Este era el plato más picante y a ambos nos hubiera gustado más picante (es cierto que tanto Quesoy como yo, somos unos forofos del picante) pero el plato era fantástico. Nuestro error fue pedir dos platos principales que ambos llevaban arroz. Este se apoderó de nuestro apetito hasta hacerlo desaparecer por completo.
Como postre pedimos un cremoso con frutos del bosque.
Quesoy remató la cena con su consabido ristreto.

Buen sitio para los amantes de la cocina thai, el picante y la comida para compartir.