PARTICIPA EL JUEVES 25 DE JUNIO DE 2009 EN LA QUINTA CENA DE LOS LECTORES DE ELMIERCOLESTOCA




En esta ocasión agradecemos tanto al restaurante La Llantia Dorada que nos acoja en su local como a la Bodegas Juan Gil que vengan a presentarnos sus vinos.

Y este es el menú que disfrutaremos el jueves 25 de Junio en la quinta cena de grupo de Elmiercolestoca en el restaurante La llantia Dorada


Entrantes
-Sopa fría de melón con virutas de jamón caramelizado y coulis de vino de Oporto.
*
-Ensalada “Caponata” con berenjena, tomatitos secos, cebolla, aceitunas arbequinas y negras, queso fetta y vinagreta de mostaza antigua al vinagre de Módena.(Todos los ingredientes de esta ensalada se rehogan y sofrien previamente).
*
Principales
-Curry rojo de pescado al estilo “thai”con verduras y timbal de arroz basmati.
*
-Tagine de pollo al estilo marroquí con albaricoques, ciruelas pasas y almendras con cous-cous ecológico a la hierbabuena.
*
Postres
-Tarta de chocolate al ron añejo con confitura de frutos rojos.
*
-Helado de queso fresco y miel con crocante de chocolate blanco y cacahuete.


Y todo esto acompañado por un tinto joven y otro crianza de las Bodegas Juan Gil (Jumilla, Murcia)


Y leída la sugerencia de Juan Ferrer, gran sabedor de lo que es maridar una cena, y puestos en contacto con la Bodega Juan Gil de Jumilla ( Murcia) la persona de contacto, Antonio Caravantes ha hecho las gestiones necesarias para que en nuestra soberbia cena hubiera algún vino blanco para mejorar el acompañamiento.

Dado que las Bodegas Juan Gil son responsables enológicos de ocho bodegas diferentes más, ha contactado con una que tienen en Segovia, DO Rueda, 'Bodegas y viñedos Shaya' y vamos a tener el placer de tener en nuestra cena un desconocido: Shaya vino que termina de aparecer en el mercado americano y que aún no se comercializa en nuestro país. Seremos los primeros en catarlo.
Agradecemos el esfuerzo y damos la bienvenida a este blanco de Rueda a nuestra quinta cena de grupo.

En Valencia, C/ Hierba nº 4 (Ciutat Vella)

24 de junio de 2009. Restaurante Albacar

Una noche más vamos al distrito de L'Eixample, al barrio del Pla del Remei, a buscar un clásico entre los restaurantes de Valencia: Albacar. Es una recomendación de uno de nuestros seguidores y amigos: gracias Alfredo.
Nada más entrar nos llama la atención lo bien vestidas que están las mesas, lo enormes que son y la buena distribución que existe entre ellas. Todo destila buen gusto. Nos llama la atención los fantásticos bodegones que cuelgan de sus paredes. Es un local ciertamente acogedor.
Nos ubican en una mesa y nos dejan las cartas para que vayamos eligiendo. También Antonio, quien se va a ocupar de nosotros toda la cena, nos canta los platos que tienen fuera de carta. Nos informa que Salvador no se encuentra en la sala por motivos de salud, desde aqui le deseamos una pronta recuperación. Este restaurante, no debemos olvidar, está regido por dos hermanos: Salvador a cargo de la sala y Bernabé a cargo de los fogones, construyendo un tandem dificil de superar.
Con lo leído y lo escuchado nos decantamos por: en el vino nos vamos a un amado por nosotros Abadía Retuerta del 2006 que viene a una inmejorable temperatura y que, como siempre, nos vuelve a enamorar al primer trago. Como detalle de la casa nos traen unos champiñones al jerez junto con un trocito de queso manchego que nos abren y atontan las papilas pero que tomamos con buen apetito.
Como entrantes nos decidimos por alguno fuera de carta y otros de carta: una ventresca con salsa mimosa de anchoa (deliciosa y hetérea ventresca con una estupenda salsa con regusto a anchoa), una parrillada de frutas con foie a la plancha (¿existe el paraiso? pues seguro que esto se come allí. Impresionante: bien planchado el foie y con un matrimonio ideal con la piña que nos sorprende y entusiasma) y una vieira con boina de breva y salsa de romero (¡madre mía! nuevamente nos adentramos en el paraiso). El detalle es que dado que saben que todos los platos los vamos a compartir, nos emplatan todos ellos en dos medias raciones. Excelente detalle.
Como plato fuerte nos inclinamos por un solomillo de ternera con queso derretido: tiernísmo y hecho a nuestro gusto (muy pero que muy poco hecho como les habíamos pedido) acompañado por unas patatas panaderas con verduras y salsa de pimentón de la Vera. Delicioso.
Como postre pedimos una crema de chocolate con naranja y yogur griego: excelente crema de chocolate con tiras de piel de naranja confitada sobre una cama de yogur griego nada dulce. Bueno, bueno y bueno.
Quesoy remata la cena con su consabido ristreto y nos preguntan si queremos algún licor. Karoleta pide un bourbon y le traen la botella del único que tienen: Woodford Reserve. Fabuloso bourbon que nos sirven en unos chupitos. Para hacerlos más llevaderos, Quesoy pide una copa de balón llena de cubitos de hielo donde agitamos el bourbon y devolvemos a los chupitos. Así se consigue bajar la temperatura del bourbon sin aguarlo y hacerlo un delicioso trago de fin de cena. Para acompañarlos nos traen unas chocolatinas de chocolate bien negro con trocitos de cerezas maceradas en aguardiente...¡deliciosas!

1. Ingredientes reconocibles: 9
2. Saludable: 7
3. Emplatado y decoración: 9
4. Raciones generosas: 8
5. Cocina regional: No
6. Tecnología punta: No
7. Sabroso: 9
8. Equilibrio: 7
9. Vajilla y cristaleria: 9
10. Relación calidad-precio: 9
Puntuación total: 67 sobre 80

(Si quieres saber en qué nos basamos para puntuar en nuestro decálogo, pincha aquí)

Excelente restaurante para disfrutar de una muy buena cocina de mercado.

En Valencia c/ Sorní nº 35 Tel 963 951 005

17 de junio de 2009. Casa Botella Taberna

Volvemos al distrito del L'Eixample, al barrio de Russafa, a buscar esta taberna para nuestra cena de miércoles.
Es un local pequeño, sin mucha decoración y lo esencial para que sea acogedor, con mesas de marmol y lámparas que alumbran impecablemente cada una de las mesas.
Un miércoles más nos encontramos en un local sin público (fuera, en la terraza si hay otra mesa). Nos traen las cartas. La de vinos es corta, tiene algunas referencias que nos hacen gracia pero hace tanto calor que también nos gustaría cenar con cava. Pedimos que nos dejen ver las botellas: la de cava y un rioja para viéndolas, decidirnos por cual pedir para la cena. Ambas nos gustan pero al leer que el cava es un vintage, nos decidimos por él: Llopart (2005) de Sant Sadurni D'Anoia, un cava que pese a la edad, conserva la frescura y el color, así como el ímpetu de la juventud; con buena entrada y suavidad y que se queda en boca lo justo para eliminar sabores pero tampoco pretende ser el director de la cena. Rico, rico.
Como platos nos inclinamos por: unas sardinas maceradas en vinagre de módena y puré de dátiles (deliciosas sardinas maceradas, que nos recuerdan a los boquerones en vinagre pero mucho, mucho, más delicados y de mejor sabor, más suaves, que junto al puré de dátiles, forman una pareja perfecta), unas huevas de arenques (nada más ver la palabra arenque en la carta, Karoleta y su amor por los salazones, no se ha resistido: trozos de hueva sobre un lecho de cebolla macerada en aceite de oliva y rebanadas de pan tostado, que forman un producto perfecto, aunque impensable y sorprendente, la fuerza de la cebolla se ve superada, y con creces, con el tremendo sabor de la hueva. Nos enamora). Como platos fuertes nos inclinamos por un tartar de salmon con crema de yogur y eneldo (medallones de salmón con una salsita que conjuga a la perfección con el pescado. Este plato hace las delicias de Quesoy que se pasa suspirando todo el plato) y milhojas de cordero con nabo amarillo (soberbio cordero desmigado, haciendo un pastel, sobre un lecho de nabos, con los que realizan un matrimonio perfecto y la grata sorpresa de unos hijos cocinados sobre dicho pastel. Plato estrella de la noche, sin dudarlo).
Como postre nos inclinamos por uno de la casa: dulce de Germán, una especie de flan del que descubrimos que llevaba queso y canela pero no quieren desvelarnos más...fantástico.
Para rematar la cena, Quesoy pide su consabido ristreto y Karoleta le acompaña con un chupito de bourbon, detalle de la casa.
Buena cena.

1. Ingredientes reconocibles: 9
2. Saludable: 6
3. Emplatado y decoración: 6
4. Raciones generosas: 8
5. Cocina regional: No
6. Tecnología punta: No
7. Sabroso: 8
8. Equilibrio: 6
9. Vajilla y cristaleria: 6
10. Relación calidad-precio: 9
Puntuación total: 58 sobre 60

(Si quieres saber en qué nos basamos para puntuar nuestro decálogo, pincha aquí)

Buen local para grupos y familias.

En Valencia. C/ Pintor Salvador Abril nº 28 Tel 654 849 333

10 de junio de 2009. La Fitorra

Esta noche nos vamos al distrito de Algiros, al barrio de la Vega Baixa, a buscar un asador argentino. Es una recomendación de una pareja de seguidores de esta página: Rosa y Jose. Muchas gracias.
Es un coqueto local, pequeño, agradable y, en estos momentos de calor, con una buena terraza. Pese al calor, decidimos cenar dentro del local porque nos parece que es mucho más agradable que cenar en la 'calle'. Nos dejan que escojamos la mesa que nos guste porque por ahora, están todas desocupadas.
Durante toda la cena nos acompañará Luis, el patriarca de esta familia argentina que regenta este restaurante. Nos trae las cartas y un detalle de la casa: unas aceitunas arbequinas deliciosas que atacamos con placer porque realmente, tenemos hambre.
Nos ayuda a elegir el vino argentino porque desconocemos las marcas, no así las uvas. Nos indica uno que es de Salta, del valle de Cafallate, de las Bodegas Etchart, un malbec: Etchart Privado. Vino goloso, que inunda la boda y persiste en ella largo tiempo; al primer trago es tremendamente alcohólico (no en vano tiene 14.5 grados) pero se atempera y suaviza con el paso del tiempo. Muy buen compañero que va a casar a la perfección con nuestra cena.
Para cenar nos inclinamos por unos entrantes muy típicos argentinos: empanadillas criollas (deliciosas, nos indican que las tomemos con las manos, envueltas en la servilleta que nos facilitan porque es la forma correcta de tomarlas. Buenas buenas), provoleta (queso provolone fundido con orégano que casi no dejamos enfriar) y unas mollejitas de ternera (suaves y gustosos filetitos del timo de ternera, 'casquería', que devoramos hasta la última).
Como plato fuerte nos inclinamos por un lomo alto hecho vuelta y vuelta (en la carta están los tres puntos de carne: vuelta y vuelta -semicrudo-, al punto -algo más hecho y hecho...pues eso, hecho). Nos viene un tremendo solomillo bien planchado, lomo alto tierno y gustoso, acompañado de unas buenas patatas fritas muy tostadas y con dos sales: volcánica y maldon. También con salsa chimichurri. Pero la carne está tan sabrosa que sólo requiere algo de sal para rerdondear el plato.
Hemos dejado algo de espacio para el postre. Quesoy ya había detectado su favorito: un panqueque, una creppe rellena de dulce de leche (mmmmmmm ¡dulce dulce!) y para acompañarlo nos ponen dos licores: un orujo de hierbas que había elegido Karoleta y un licor argentino para que lo probemos que después de darle vueltas y probarlo y comentarlo con Luis, nos recuerda a las gominolas de cola de cuando eramos niños (Luis nos dice que en Argentina habían unos caramelos que se llamaban 'caramelos media hora' y que este licor sabe igual: a cola). También nos invitan a estos licores.
Una fantástica cena argentina.

1. Ingredientes reconocibles: 8
2. Saludable: 7
3. Emplatado y decoración: 6
4. Raciones generosas: 8
5. Cocina regional: Si
6. Tecnología punta: No
7. Sabroso: 9
8. Equilibrio: 6
9. Vajilla y cristalería: 8
10. Relación calidad-precio: 9
Puntuación total: 61 sobre 80

(Si quieres saber en qué nos basamos para puntuar nuestro decálogo, pincha aquí)

Local muy indicado para cenas íntimas, de amigos y pequeños grupos. También familias.

En Valencia c/ Rubén Darío nº 18 Tel 963 277 898

3 de junio de 2009. Na Jordana Artium

Esta calurosa noche volvemos a la Ciutat Vella, al barrio del Carmen. Nos dirigimos a un local que nos ha recomendado Silvia, del restaurante L'Hamadriada. Gracias Silvia.
Llegamos y otra noche más, estamos solos en el local. Nos atiende el dueño que se va a ocupar de nosotros toda la noche. Nos permite elegir cualquier mesa que nos guste y vamos a una que tiene bastante luz (así las fotos saldrán con su color real).
Nos trae las cartas. La de vinos es corta pero con entradas interesantes aunque poco aventureras. Pero Karoleta tiene ganas de celebración y observa que entre los cavas se encuentra Gramona Immperial del 2004: cava muy avinado, elegante, tranquilo y buen compañero de cualquier cena que se le ponga. Nos lo quedamos. Nos informa que es la última botella...no creo que necesitemos más, pero es un muy buen detalle (no hay nada peor que querer continuar la cena con un vino o cava elegidos y que no tengan más botellas).
Como detalle de la casa nos ponen unos chupitos de salmorejo con crujiente de jamón que nos ponen las papilas, el estómago y el alma en buena disposición para comenzar la cena. La carta de comidas tienen bastante tapas y dado que Quesoy ha comido un buen corte argentino en su comida, nos decidimos por hacer una cena de picar. Siguiendo las sugerencias que nos hacen, nos decidimos por: anchoas del Cantábrico (cómo no) que vienen sobre un lecho de buen aceite de oliva y unas bolitas de crema de queso. Las anchoas están algo apelmazadas pero de sabor son deliciosamente saladas. Otro plato será un micuit con gelatina de patxarán (delicioso foie que nos devoramos sin rechistar mientras vamos picoteando en busca de las minucias de patxarán). Como tapas calientes: revueto de foie, setas y jamón ibérico (buen revuelto con generosa ración de tropezones) y pimientos de piquillo rellenos de carne y setas y salsa de setas (los pimientos están en su punto, tanto que se comen el sabor de la carne. La salsa...la salsa....la salsa está ¡impresionante!).
Esta noche queríamos llegar a los postres por lo que se nos han quedado platos en la recámara (como los huevos con trufa que nos informa vienen con compañía: chorizo, jamón y no se cuantas cosas más...así que para otro día más fresquito). Como postre pedimos unos canutillos de queso Idiazabal. Sin palabras nos dejan: ¡¡buenos buenos buenos!!
Para rematar la cena Quesoy se pide su consabido ristreto y como digestivos nos invitan a unos chupitos de patxarán casero (más ligero y menos dulce de lo que recordábamos) que nos hace marcharnos bien contentos.

1. Ingredientes reconodibles: 10
2. Saludable: 7
3. Emplatado y decoración: 7
4. Raciones generosas: 8
5. Cocina regional: Si
6. Teconología punta: No
7. Sabroso: 8
8. Equilibrio: 4
9. Vajilla y cristalería: 7
10. Relación calidad-precio: 9
Puntuación total: 60 sobre 80

(Si quieres saber en qué nos basamos para puntuar nuestro decálogo, pincha aquí)

Buen local para cenas de grupo, familia y parejas.

En Valencia, c/ Salvador Giner nº 4 tel 963 293 715