Esta noche nos damos la oportunidad de degustar la cocina del recién incorporado Chef, Vicente Torres (Restaurante La Sucursal-IVAM) en un entorno realmente precioso, exótico y elegante.
Entramos en L'Oceanogràfic a través del parking (gratuito) y nos dirigimos a la zona de acceso a visitantes. Para entrar al restaurante no es necesario pagar la entrada del recinto, siempre que se haya hecho reserva.
Tras una primera mirada a la carta, pasamos directamente a escoger el vino. A pesar de no tener bodeguero invitamos a la mesa al vino nº27, un tinto de Viñas del Vero, el Blecua 2000, D.O. Somontano, adecuado al nivel que merecen tanto el entorno como las viandas, cerrado al principio fue decantado perfectamente y ganando en aromas y sabores hasta dejar el listón verdaderamente alto, confirmando la gran calificación obtenida en la conocida guía Peñin.
En cuanto a la comida, y tras una delicada "chuche" de foie con reducción de PX, atención de la casa, optamos por dos entrantes, uno frío, el de Anchoas del Cantábrico con Caviar de tomate y aceite de oliva y uno caliente, el de Buñuelos de Foie con Espuma de Setas y Virutas de Frutos secos. Imperdonable que en las deliciosas anchoas se les escaparan algunas barbas, que aunque no malograban el plato, si, en ciertos bocados, lo hacían desapacible. Su sabor, sin embargo, nos recordó las exquisitas anchoas tomadas en otra cena de los miércoles (25-10-2006) en Bodega Casa Montaña.
Como plato fuerte, Lechón crujiente con Gelée de Jamón y Grosellas, con un impagable detalle de esta selecta cocina, ya que al decir que era para compartir, nos lo emplataron por separado con una recreación de la decoración del plato original, excelente gesto que permitía presentir lo que la degustación iba a confirmar, un plato simplemente perfecto.
El postre, un fin de fiesta realmente delicioso, acertamos con el Sophia y el Maracaibo, el primero consiste en un soberbio helado de yogur húngaro (agrio) sobre un pequeño brazo de gitano relleno de frutos rojos y el segundo, todo un festival de chocolate de todo tipo y texturas sobre un barquillo que rememoraba nuestra infancia, aquella galleta que acompañaba nuestras sesiones de cine juvenil, el turrón Meivel, sólo decir que Karoleta echó de menos la presencia de un chocolate más negro, amargo, para redondear el plato.
El doble-expreso, desde luego, a la altura de los platos, del servicio y del entorno. Para repetir.
L'Oceanogràfic de Valencia. Av Autovia del Saler CP 46013 Teléfono 961975565
Entramos en L'Oceanogràfic a través del parking (gratuito) y nos dirigimos a la zona de acceso a visitantes. Para entrar al restaurante no es necesario pagar la entrada del recinto, siempre que se haya hecho reserva.
Tras una primera mirada a la carta, pasamos directamente a escoger el vino. A pesar de no tener bodeguero invitamos a la mesa al vino nº27, un tinto de Viñas del Vero, el Blecua 2000, D.O. Somontano, adecuado al nivel que merecen tanto el entorno como las viandas, cerrado al principio fue decantado perfectamente y ganando en aromas y sabores hasta dejar el listón verdaderamente alto, confirmando la gran calificación obtenida en la conocida guía Peñin.
En cuanto a la comida, y tras una delicada "chuche" de foie con reducción de PX, atención de la casa, optamos por dos entrantes, uno frío, el de Anchoas del Cantábrico con Caviar de tomate y aceite de oliva y uno caliente, el de Buñuelos de Foie con Espuma de Setas y Virutas de Frutos secos. Imperdonable que en las deliciosas anchoas se les escaparan algunas barbas, que aunque no malograban el plato, si, en ciertos bocados, lo hacían desapacible. Su sabor, sin embargo, nos recordó las exquisitas anchoas tomadas en otra cena de los miércoles (25-10-2006) en Bodega Casa Montaña.
Como plato fuerte, Lechón crujiente con Gelée de Jamón y Grosellas, con un impagable detalle de esta selecta cocina, ya que al decir que era para compartir, nos lo emplataron por separado con una recreación de la decoración del plato original, excelente gesto que permitía presentir lo que la degustación iba a confirmar, un plato simplemente perfecto.
El postre, un fin de fiesta realmente delicioso, acertamos con el Sophia y el Maracaibo, el primero consiste en un soberbio helado de yogur húngaro (agrio) sobre un pequeño brazo de gitano relleno de frutos rojos y el segundo, todo un festival de chocolate de todo tipo y texturas sobre un barquillo que rememoraba nuestra infancia, aquella galleta que acompañaba nuestras sesiones de cine juvenil, el turrón Meivel, sólo decir que Karoleta echó de menos la presencia de un chocolate más negro, amargo, para redondear el plato.
El doble-expreso, desde luego, a la altura de los platos, del servicio y del entorno. Para repetir.
L'Oceanogràfic de Valencia. Av Autovia del Saler CP 46013 Teléfono 961975565
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