Ambiente: acogedor e informal (pero con mesas muy bien vestidas)
Plato que no te puedes perder: carne (como más os guste, en steak tartar, en chuletón...)
Nos sirvieron todo lo que pedimos de la carta: si
1. Ingredientes reconocibles: 9
2. Saludable: 9
3. Emplatado y decoración: 9
4. Raciones generosas: 8
5. Cocina regional: no
6. Tecnología punta: no
7. Sabroso: 9
8. Equilibrio: 8
10. Relación calidad-precio: 8
Puntuación EMT 68 sobre 80
Puntuación del grupo PIG: 3
Como entrantes nos pedimos un par de montaditos: de cocochas con cebolla caramelizada y emulsión de pil pil (impresionante) y otros de morcilla de Burgos con queso de cabra y vinagreta de miel (de nuevo, impresionante).
Como postre nos pedimos unas trufas con aceite y sal: las trufas están muy ricas pero la sal maldon las eleva varios puntos. Buena combinación.
Quesoy remata la cena con su consabido ristreto mientras apuro los últimos tragos de mi copa de vino tinto.
Un fantástico local para los amantes de la carne.
Y después de mucha búsqueda, las fotos de esta cena no aparecieron, se quedaron en ese limbo donde van las cosas que no aparecen. Las que si aparecen en ese post, las fotos, claro, son las de una segunda cena que hiciemos en este local. Lo cierto es que en la primera visita nos quedamos con las ganas de probar esa deliciosa carne que veíamos pasar a otras mesas. Así, que quince días después de la primera cena, volvimos a por ella.
Esta vez para acompañar a nuestra cena pedimos El jefe de la tribu, vino de la bodega El Angosto, D. O. Valencia. Nos gusta al primer trago.
Dado que la cena iba a ser contundente, como entrantes sólo pedimos unas anchoas, del Cantábrico y de Santoña. Ambas anchoas deliciosas, suaves, bien desespinadas y tremendamente cremosas. Ricas, ricas de verdad.
La carne, un lomo bajo de buey: cremoso, muy tierno, muy sabroso y a nuestro gusto (muy muy poco hecho). Viene acompañado de unas patatas paja. La carne es soberbia.
Como postre repetimos unas trufas con aceite y sal. Quesoy remata la cena con su consabido ristreto.
Un local imprescindible para los amantes de la carne, de la buena carne.
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